Exposición Fotográfica - Fotos antiguas 2015

Exposición de fotos antiguas realizada en el Ayuntamiento de Litos (Zamora), en 2015. Fotografías de los vecinos del pueblo que presentaron antruistamente, y fuí recogiendo, y restaurando en la mejor manera posible, para su posterior exposición.

Una pausa para la nostalgia

Una imagen muestra a una mujer y una niña ante un mapa de Europa. Alemania, Francia… Países que en Litos se conocen de primera mano, porque muchos de sus habitantes tuvieron que emigrar hasta allí para ganarse el pan. Algunos siguen allí. O sus descendientes. Otros volvieron. Y para todos, este encuentro con la exposición fotográfica que se puede ver en el Salón de Plenos del Ayuntamiento tiene un mucho de visita nostálgica al pasado. Más allá del juego de reconocer quién es quién en esas fotos en blanco y negro que muestran otros tiempos y retratan una forma de vida.

La matanza, las labores del campo, las procesiones, los encuentros familiares… Todo aparece fielmente dibujado en las más de cien fotos que Pedro Uribarri ha recopilado gracias a la aportación de los vecinos de la localidad. Concretamente, 112 imágenes que ha escaneado puerta a puerta, algo que agradece por la confianza que han demostrado los vecinos a la hora de ceder sus recuerdos para la exposición.

Lo bonito, sin embargo, no es solo ver las fotos en blanco y negro o en colores desvaídos por el tiempo y elucubrar sobre quién es cada cual. Lo entrañable de la exposición es que cada imagen esconde una historia. Una de esas que hablan de tiempos diferentes. Uribarri, ese tipo de la cámara que aparece allá donde ocurra algo en las fiestas de Litos, las ha escuchado casi todas.

Y segun parece se ha quedado con ganas de más. “La exposición se montó en quince días”, explica, y eso le ha obligado a correr un poco más de la cuenta para tenerlo todo a punto. No solo es escanear las fotos. Hay que retocarlas un poco, recuadrarlas para que todas se puedan positivar en 13x18… Trabajar, en suma, para que los recuerdos luzcan con el brillo que merecen.

“Ya habría material para otra exposición más”, asegura. Y es que cuando los vecinos han comprobado el resultado han vuelto a casa y han redescubierto en los cajones viejos, en la cómoda olvidada, en el cofrecillo del abuelo, un sinfín de imágenes que no son solo fotografías. Son retratos de recuerdos. Retazos de momentos que, unidos, forman la historia de un pueblo que estos días, en plenas fiestas, ha hecho una pausa para la nostalgia.

Antonio Encinas - Periodista de El Norte de Castilla.